Cada 26 de julio se celebra el Día de los Abuelos, una fecha que busca fomentar en la sociedad un comportamiento respetuoso, responsable e inclusivo hacia los mayores.
La brecha digital supone una clara situación de discriminación y desventaja hacia las personas mayores, por lo que su progresiva eliminación a través de la formación es una tarea a la que está llamada a contribuir toda la sociedad.
Gracias a la tecnología, los mayores pueden vivir más seguros, felices, empoderados y cercanos a sus seres queridos. Y hay dispositivos que pueden contribuir a ello, como recuerdan desde SPC, la marca española de electrónica de consumo.
El Día de los Abuelos, que se celebra cada 26 de julio, es la fecha en la que se pone el foco en la necesidad de fomentar en la sociedad comportamientos más respetuosos e inclusivos hacia las personas mayores. Y es que este colectivo sufre fenómenos como el edadismo, que consiste en la discriminación de las personas por razón de edad, o la brecha digital, que, en el caso de los mayores, implica mermar su capacidad de vivir empoderados en una sociedad en la que la tecnología permite amplificar a las personas sus capacidades de relacionarse con otros, realizar actividades y gestiones o aprender y disfrutar del ocio.
La tecnología es un facilitador de la vida diaria y, como sociedad, tenemos la obligación moral de reducir la brecha digital para que los mayores puedan utilizar con normalidad aquellos dispositivos y plataformas que les empoderan. Como explican desde SPC, la marca española de electrónica de consumo, que ha recopilado algunos consejos para que los mayores puedan acceder mejor a la tecnología:
Usar dispositivos que se adapten a sus necesidades
Para que los mayores se inicien en la tecnología y puedan acceder, al mismo tiempo, a una amplia variedad de opciones y funcionalidades, lo principal es que lo hagan utilizando dispositivos concebidos, diseñados y fabricados especialmente para ellos como los smartphones para personas mayores. Son teléfonos móviles con todas las capacidades habituales de un smartphone, pero con un proceso de usabilidad adaptado a las necesidades de este colectivo, como pueden ser iconos grandes, teclas físicas que se combinan con pantallas igualmente táctiles o botones de emergencia para alertar a contactos cercanos en caso de necesidad. Modelos como SPC ZEUS 4G PRO reúnen funcionalidades específicamente diseñadas para el público sénior.
Además, los teléfonos para mayores de SPC incorporan Smart Help, un conjunto de funcionalidades de ayuda inteligente para introducir la tecnología entre los más mayores de casa de forma fácil, rápida y sencilla. Esta función permite realizar una configuración remota de los dispositivos de nuestros familiares mayores desde otro teléfono y desde otro lugar, subir el timbre de la llamada al máximo en caso de llamar a nuestros abuelos y ellos no hayan respondido, o programar notificaciones inteligentes que nos avisarán si el dispositivo de nuestro familiar no ha registrado actividad recientemente.
Pero la oferta de terminales orientados para el público sénior no acaba aquí, en el mercado hay tablets con un diseño enfocado especialmente en las personas de edad avanzada, como puede ser SPC GRAVITY 3 4G SENIOR EDITION, y preparadas para servir a los mayores como compañera y aliada en su día a día, aun cuando no dispongan de router en casa.
Conocer unas nociones muy básicas para empezar a usar la tecnología
De nada sirve equipar a los mayores con un dispositivo si no se les enseña a manejarlo. Desde SPC recomiendan explicar los fundamentos de los dispositivos tecnológicos, como pueden ser las pantallas táctiles, la navegación por los menús de opciones o el ecosistema de aplicaciones.
Además, hay que darles consejos sobre opciones de configuración del dispositivo que pueden ser útiles para ellos, como el ajuste del tamaño del texto, el brillo de la pantalla o el volumen del sonido. Estas sencillas opciones darán mucho poder al usuario, a quien también hay que explicar cómo gestionar y cargar la batería del dispositivo, medidas de autoprotección básicas (sobre todo a la hora de navegar por Internet) o el uso de sistemas de protección del dispositivo, como pueden ser contraseñas, bloqueos de pantalla, etc.
Emplear la tecnología para comunicarse y estar más cerca de sus seres queridos
Si algo tiene la tecnología es que acerca a las personas, y eso se valora especialmente en el caso de los mayores, que sufren mayoritariamente el fenómeno de la soledad no deseada. Por eso, es esencial que nos encarguemos de instalar y configurar aplicaciones de mensajería o videollamada, ya que serán herramientas muy útiles para que mantengan el contacto con sus amigos y familiares.
También hay que procurar que aprendan a compartir archivos, como fotografías, e incluso, ¿por qué no? que se animen a publicar contenidos en redes sociales ya que estas plataformas pueden brindarles una mayor sensación de cercanía a otras personas y de inclusión en una sociedad que muchas veces ni entienden ni les entiende.
No compartir datos personales y otros aspectos de seguridad
Por último, debemos hacer hincapié en la seguridad de los dispositivos para evitar que la tecnología se vuelva en contra de los mayores. Es importante explicarles los principales riesgos cibernéticos, darles las herramientas para saber detectarlos y evitarlos, y configurar sus dispositivos con medidas de seguridad que reduzcan el riesgo.
En este sentido, podemos activar Play Protect en la Play Store de Android para mantener el dispositivo libre de malware y de aplicaciones dañinas. Se recomienda que solo se instalen apps procedentes de Google Play Store y nunca de terceros desconocidos, ya que no ofrecerán garantías de seguridad y privacidad. Además, hay que fomentar una navegación segura por Internet, destacando que no deben descargar archivos de fuentes desconocidas o poco fiables. Si configuramos las opciones de privacidad y seguridad de Google Chrome, podremos cerciorarnos de que el dispositivo estará más protegido durante la navegación.
A la hora de navegar, también debemos explicar a los mayores que no deben compartir sus datos personales con terceros. Tampoco sus datos bancarios, claves y contraseñas, direcciones o cualquier información que los ciberdelincuentes puedan solicitar a través de un correo electrónico, whatsapp o SMS fraudulento. Hay que recordar que los bancos nunca van a solicitar este tipo de datos a través de estos medios, así como darles consejos a la hora de utilizar redes públicas en cafeterías, hoteles o parques de la ciudad a los que se conectarán vía WiFi para navegar.
Con estos sencillos consejos, podremos contribuir entre todos a reducir la brecha digital y hacerles sentir aún activos y necesarios en nuestra sociedad.
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